Ya estamos aquí.

Un nuevo año, y ya estamos de nuevo inmersos en nuestra décimoquinta semana inglesa. Este año nos ha tocado madrugar mucho, y una alumna no ha llegado a tiempo de coger el autobús que nos esperaba a la puerta del colegio; con harto dolor de nuestro corazón y nerviosismo, hemos tenido que salir sin ella, pero bueno, el padre ha reaccionado con prontitud y la hemos recogido en Collado Villalba. Todos hemos respirado con alivio.
El viaje ha sido tranquilo hasta que hemos cogido el cercanías que nos lleva a Santa Susana, allí se nos ha aparecido un iluminado, nacido en no sé qué planeta de la Vía Láctea que nos ha alertado sobre la aparición de un gran tsunami para dentro de unos quince días, él como maestro de la luz nos avisa. Bueno además del tostón, a los chicos de ese vagón les ha entretenido y el viaje se les ha hecho más corto y llevadero.
Una vez que hemos llegado al camping, todo ha ido muy rápido: repartición de bungalows y acoplamiento.
Comida con horario inglés y afortanadamente a la española, ensaladas, macarrones boloñesa, filetes empanados patatas y postre.
Por la tarde han ido a montar a caballo y a la orientación y después, como hace mucho calor y solito, un bañito en la piscina y ducha posterior.
Bueno, a las ocho tenemos la cena os dejamosy mañana continuamos. La verdad es que estamos agotados y queremos descansar y de momento todo el mundo contento y bien.
¡Ah!, se me olvidaba felicitar al equipo de atletismo del colegio que han sido subampeones de Castilla y León este sábado en Valladolid.